Tu boca sagrada y profana,
la miel y la hiel confundidas.
Tu boca ortodoxa y pagana,
tu boca odiada y querida.
la miel y la hiel confundidas.
Tu boca ortodoxa y pagana,
tu boca odiada y querida.
Tu boca sobre mi boca
como manzana prohibida,
en un instante provoca
toda la muerte y la vida,
todo el amor y el desprecio,
toda la risa y el llanto,
todo lo sabio y lo necio,
todo lo impuro y lo santo.
Tu boca razón y delirio.
Tu boca violencia y ternura.
Tu boca placer y martirio
con dulce sabor a amargura.
Tu boca sobre mi boca
como ciruela madura,
en un instante provoca
todo el juicio y la locura,
todo el temor y la audacia,
la humildad, la rebeldía.
La fortuna y la desgracia,
la vergüenza y la osadía.
Quien sabe que alondra nocturna
puso en tu boca su canto.
qué diablo y qué ángel se turnan
para hacerme amarte tanto.
De: María Cristina Borroni.
marzo 14th, 2012 at 8:01 am
[…] boca en tu boca, tu boca recorriéndome mi piel, los deseos, las ansias desbordándose imposible de […]